Holliday Grainger tiene una de esas caras que nunca se olvidan. Supongo que cuando era pequeña, era una de esas niñas a las que uno quiere morderle los cachetes y comérsela a besos. Y si a eso le agregas el marcadísimo acento inglés, de Mánchester, para ser exacta, tienes como resultado a una mujer encantadora, […]