Esta campaña ha sido compensada por Collective Bias, Inc. y su anunciante. Todas las opiniones me pertenecen. #GlucernaContigo #CollectiveBias
Soy hija de una mujer con diabetes, por lo que, según estudios, tengo 30 por ciento de posibilidades de padecer esta enfermedad en algún momento de mi vida. El riesgo aumenta a partir de los 40 años; es decir, ya me está acechando.
Y la situación de los latinos y este mal en Estados Unidos no es nada halagüeña; 23 por ciento de este grupo padece este trastorno y se calcula que 57 millones de personas tienen prediabetes; 35 por ciento de estas podrían ser hispanas.
Considero que nunca he tenido malos hábitos alimenticios… Bueno, excepto que soy adicta al pan dulce y en general a las harinas. En otras palabras, tengo que hacer esfuerzos sobrehumanos para no abusar de estas delicias cuando las tengo enfrente.
Algo que me funciona de maravilla cuando sé que debo medirme en lo que como es preguntarme, “Victoria, ¿quieres tener diabetes? ¿O prefieres una vida larga y sana haciendo pequeños sacrificios?”. Por supuesto que quiero una vida larga y sana. Así que inmediatamente, o me abstengo de comer el “veneno”, o como una porción pequeña.
Gracias a mi madre he aprendido mucho de la diabetes tipo 2, la que ella sufre. Pero sobre todo, he aprendido que no es la medicina lo que prolongará la vida del enfermo, sino los hábitos alimenticios que este tenga.
Así que desde hace muchos años modifiqué mi dieta. Por ejemplo, eliminé casi por completo las comidas fritas; casi no uso azúcar, ni natural ni artificial, y prefiero las harinas integrales, aunque también con medida. En mi alacena no hay galletas de ningún tipo y las sodas están prohibidas en mi refrigerador.
Dirás que mi vida no tiene sabor, pero sí la tiene. Hay productos en el mercado que prefiero comer y comprar a mi mamá para esos momentos en que te mueres por algo dulce. Las barras nutritivas Glucerna es uno de ellos. Les tengo confianza porque son bajas en calorías y azúcares y están hechas especialmente para personas con diabetes.
Este producto, que se puede conseguir sin receta en las tiendas Walmart, contiene Carbsteady Ultra, que son carbohidratos que se digieren lentamente en el organismo y que están diseñados para ayudar a minimizar los altibajos de la glucosa. Me gusta la de avena con pasas, aunque hay una variedad disponible.
Así que como parte de mi régimen antidiabetes, suelo desayunar ligero, aunque a veces se cuele por ahí un delicioso pan dulce con leche (no me gusta el café). Uno de mis preparados favoritos es el yogurt con frutas. El de mango con mamey y papaya es por el que muero.
Te comparto cómo hago mi menjurje, que es muy sencillo.
Ingredientes
- 1 taza de yogurt natural, sin grasa
- 1/3 taza de mango en cuadritos
- 1/3 taza de papaya en cuadritos
- 1/3 taza de mamey en cuadritos
- Una barra nutritiva de Glucerna
Manera de prepararse
Poner la taza de yogurt en un bowl mediano y agregar toda la fruta. Luego desmoronar la barra de Glucerna y revolverla con el resto de la mezcla.
Suelo comer este yogurt después de hacer ejercicio -también necesario como medida de prevención para la diabetes-, y me deja bastante satisfecha por varias horas.
Si no has probado Glucerna puedes hacer click en este enlace para obtener un cupón de un dólar de descuento en uno de sus productos. También tiene disponible un plan de alimentación especialmente diseñado para personas con diabetes.
Puedes entrar a este enlace para saber más de Glucerna y de las opciones y variedad de productos que tiene.
asbestrecipes dice
Gracias por compartir tu historia, el parfait se mira muy sabroso y una buena opción para un desayuno o snack #client
Victoria Infante dice
Nos encanta en casa. Y a mis hijos también.
Gilda Campos dice
Me encantó tu receta!. Glucerna puede hacer que esta enfermedad pueda sobrellevarse con maneras inteligentes como esta receta. Gracias!
Victoria Infante dice
Exacto. Perfecto snack para cuando te mueres por algo dulcecito.